20.9.17

TIFF: Lo mejor de la edición 2017

Crónica de Sergio Martínez

El Festival Internacional de Cine de Toronto
es uno de los más importantes del mundo     
La 42ª edición del Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) finalizó el domingo 17 de septiembre con el anuncio de los premios y el sentido de misión cumplida. Muchas de las películas que compiten por los Oscar se estrenaron en el festival, pero las películas de fuera de Hollywood también tuvieron la oportunidad de ser proyectadas y, como resultado, ser compradas y distribuidas en todo el mundo. TIFF es una gran ocasión para mostrar grandes producciones estadounidenses, pero poco a poco se está convirtiendo también en una plataforma importante para las producciones internacionales. Este año TIFF anunció una reducción en el número de películas a ser proyectadas; aún con 339 películas mostradas durante los once días del evento (con algunas funciones a partir de las ocho de la mañana) el número de películas a ver era bastante abrumador para los espectadores y críticos por igual. El otro gran anuncio fue el retiro del director y director ejecutivo por largo tiempo, Piers Hardling, bajo cuyo mandato el evento alcanzó una fama mundial.

Toronto, por supuesto, tiene una reputación como un lugar donde las cosas se hacen muy bien. El resultado es la eficiencia, la previsibilidad (algunos dirían que esa gestión estilo suizo también conduce al aburrimiento, pero por ahora nos centraremos en el aspecto positivo). El Festival de Cine de Toronto no es una excepción a esta percepción de una ciudad en la que los buses, los tranvías y el metro, a diferencia de lo que sucede en nuestro querido pero desorganizado Montreal, corren a tiempo, y las calles parecen razonablemente limpias. (Tengo una queja principal sin embargo: ¿cómo es que en un año desde el último festival, la Union Station –el principal terminal del ferrocarril—todavía se está renovando sin muestras de progreso en la construcción y creando grandes inconvenientes a los usuarios?)
Los voluntarios y voluntarias del TIFF
Indudablemente, uno de los grandes activos de TIFF es el gran número de voluntarios. Son ellos los que, como soldados de infantería en el campo, están allí para organizar a cientos de personas (público en general, industria y periodistas) que hacen fila para entrar a los 12 cines del Scotia Bank Theatre o en los cines del Lightbox, el escenario principal del festival en King Street. Incluso la observación de celebridades a medida que llegan para conferencias de prensa o proyecciones está bien organizada con la ayuda de voluntarios. El reconocimiento dado a los voluntarios de TIFF al comienzo de cada espectáculo fue ciertamente merecido.




LOS PREMIOS
Ceremonia de entrega de premios

El Premio a la mejor película canadiense fue para Les Affamés, de Robin Aubert, una película de Quebec. El jurado comentó: "Este año, el Premio Canada Goose a la mejor película canadiense va a una película de arte híbrido que resultó ser una revelación". Esta película es una especie de comedia con algunos elementos de horror (también participan zombis). El jurado también dio una mención honorífica a otra película de Quebec, La petite fille que aimait trop les allumettes (La niña que era demasiado aficionada a los fósforos) de Simon Lavoie.

La Federación Internacional de Críticos de Cine (FIPRESCI) también estuvo presente con un jurado. El premio FIPRESCI para el programa Discovery fue otorgado a Sadaf Foroughi por Ava. El Premio FIPRESCI de Presentaciones Especiales fue otorgado al español Manuel Martín Cuenca por El Autor.

El premio en la categoría Plataforma, otorgado por un jurado internacional integrado por los destacados cineastas Chen Kaige, Małgorzata Szumowska y Wim Wenders, otorgó por unanimidad el Premio de la Plataforma de Toronto, presentado por Air France, a Sweet Country de Warwick Thornton. En su decisión, el Jurado escribió: "Esta es una épica espiritual que tiene lugar en 1929 en el Territorio del Norte de Australia".

El premio de NETPAC para la película asiática internacional se confirió al film de Huang Hsin-Yao  El gran Buddha una película taiwanesa. Los miembros del jurado fueron Rashmi Doraiswamy (India), Jian Hao (China) y Savine Wong (Canadá). El jurado comentó que la película representaba "la interfaz entre los que tienen y los que no tienen, con humor negro y estilo, innovando con el noir para representar la realidad social del Taiwan de hoy".

Finalmente, el premio People's Choice de Grolsch, es decir, el favorito del público, fue a Martin McDonagh por Three Billboards Outside Ebbing, Missouri. La segunda película más popular fue I, Tonya de Craig Gillespie y la tercera fue Call Me by Your Name de Luca Guadagnino.

ALGUNOS DE LOS MEJORES
Escena de Professor Marston and the Wonder Women
La actriz Bella Heathcote posando en 
el salón del TIFF       
Professor Marston and the Wonder Women (El Profesor Marston y las Mujeres Maravilla) (Angela Robinson, USA). Si Wonder Woman ha sido uno de los éxitos de este verano, esta película cuenta la historia de su creador, de hecho un improbable autor de historietas. William Marston (Luke Evans) y su esposa Elizabeth (Rebecca Hall) eran académicos de renombre, hacia finales de los años 20 trabajaban en una nueva teoría psicológica y en la invención del detector de mentiras. Cuando la brillante pero ingenua estudiante Olive Byrne (Bella Heathcote) se une a ellos en un polémico tipo de investigación, el resultado será la abrupta salida de los tres del mundo académico. El estilo de vida poco convencional que el trío adoptaría los pone en conflicto con las costumbres sociales de la época, pero al final inspiraría a Marston a crear el exitoso superhéroe femenino. "El profesor Marston y las mujeres maravilla" debe ser estrenado en unas pocas semanas.

El Autor (Manuel Martín Cuenca, España). Una de las películas distinguidas por FIPRESCI, El Autor (presentada bajo el título inglés de The Motive) es una comedia con algunos elementos de drama. Después de romper con su esposa y autora de best-sellers Amanda (María León), a quien la pilló engañándolo con otro hombre, Álvaro (Javier Gutiérrez) decide escribir una novela, una "real" novela en contraposición al género popular que ha hecho famosa a su esposa. Para lograr su propósito, buscaría material en las vidas de sus vecinos en el edificio donde ahora vive. Sus esfuerzos sin embargo crearían algunos problemas más grandes para él, ya que él habría entrado en las vidas de otras personas de una manera más significativa que lo que él habría deseado.

Stronger es un film de gran impacto emocional
Stronger (David Gordon Green, Estados Unidos). Esta película se basa en la historia real de Jeff Bauman, relatando la historia de su adaptación a su nueva vida después de que bombas colocadas por terroristas durante el Maratón de Boston en 2013 cortaran sus dos piernas. Bauman, interpretado por Jake Gyllenhaal, también tiene que lidiar con una relación complicada con su novia, Erin Hurley (Tatiana Maslany), que fue una de las corredoras en ese maratón. La película se estrena este viernes 22 de septiembre en Montreal. Stronger presenta un retrato realista de una familia de la clase obrera afectada de repente por una tragedia y cómo, a pesar de las dificultades, Jeff, su madre (Miranda Richardson) y su círculo inmediato de amigos fueron capaces de hacerle frente. Advertencia: la película contiene algunas escenas chocantes (cuerpo mutilado).

Daniela Vega (Marina en Una mujer fantástica) 

Una mujer fantástica (Sebastian Lelio, Chile-España). El tema de una relación entre Marina (Daniela Vega), una mujer transgénero, y Orlando (Francisco Reyes), un hombre de negocios de cincuenta y siete años aborda un tema complejo en un país donde los prejuicios sexuales siguen pesando mucho. La película trata el tema con franqueza y sensibilidad. A Fantastic Woman será estrenado en Montreal a principios del próximo año.

Parte del equipo de Una mujer fantástica en el salón del TIFF

Escena de Public Schooled
Public Schooled (Kyle Rideout, Canadá). Esta comedia fue en mi opinión una de las mejores películas canadienses en TIFF. Muestra la historia de un adolescente que toda su vida había sido educado en casa por su madre . Cuando tiene que escribir el examen de grado de secundaria, logra avistar a una niña hermosa, estudiante de ese establecimiento donde rinde el examen.  El joven decide reprobar la prueba, por lo que ahora tiene que inscribirse en la escuela para completar su educación secundaria. Mientras espera ganar el corazón de la chica, también tendrá que lidiar con las dificultades de adaptarse a la vida de la escuela secundaria, especialmente cuando algunos de sus compañeros no tendrán mucha simpatía por él.

OTROS TITULOS POR LLEGAR

Entre las muchas otras películas que se estrenaron en TIFF Darkest Hour (Joe Wright, Reino Unido), con Gary Oldman en el papel de Winston Churchill y The Shape of Water (Guillermo del Toro, Estados Unidos), un tipo diferente de película de monstruos serán estrenadas próximamente en Montreal. Las comentaremos en ese momento.

13.9.17

PELÍCULA CHILENA SE LLEVÓ PRIMER PREMIO EN FESTIVAL DE CINE DE MONTREAL

De pronto el amanecer de Silvio Caiozzi ganó el Grand Prix des Amériques en tanto que el Premio del Jurado fue para Dear Etranger de Yukiko Mishima (Japón). The Return de Chul Heo (Corea del Sur) obtuvo el Zenit de Oro como mejor primera obra.

Crónica de Sergio Martínez

La película chilena que ganó el primer premio en el Festival de Filmes del Mundo de Montreal cuenta en una forma de relatos paralelos—pasado, presente y desarrollo de lo que va siendo la construcción de la novela que escribe el personaje central—la historia de Pancho Veloso (Julio Jung) quien decide regresar al pueblo donde había nacido y crecido, en Chiloé, en la Patagonia chilena. Hacía 40 años que había salido de allí, habiéndose trasladado a Santiago, la capital, donde había llegado a ser un periodista de cierto renombre, aunque su verdadera aspiración es escribir una novela que efectivamente lo consagre como un autor serio.
Sergio Hernández y Julio Jung en el film
De pronto el amanecer de Silvio Caiozzi

El viaje a su pequeño pueblo tiene pues esos elementos de nostalgia, búsqueda de los días de infancia y juventud, y sobre todo, el recuerdo de quien fuera su gran amor de juventud. Por cierto ya nada de eso está allí, y el personaje debe enfrentar esta dualidad existencial de buscar algo que ya no existe más sino sólo como memoria, pero que aun aspira encontrar. Eso es además lo que debe ser la fuente inspiradora de la novela en la cual está trabajando. Esto último no siempre sienta bien con su mejor amigo que en algún momento le reprocha que lo que él busque en sus amigos sea “inspiración” más que el valor de la amistad y su reencuentro.

El director chileno Silvio Caiozzi
durante la entrega de premios 







Un bien merecido galardón, se trata de un film bien logrado tanto en las imágenes como en la solidez de la actuación y sobre todo, una excelente creación del ambiente del pequeño pueblo, desde su paisaje natural al entorno social y humano, donde reinan factores ambivalentes de solidaridad y habladurías, de lealtades y de pequeñas traiciones. El golpe militar de 1973, aunque no es el foco central de la historia, sí va a tener un importante efecto sobre las decisiones que el entonces joven Veloso va a tomar.

El Premio del Jurado (segundo premio) fue para el film japonés Dear Etranger de Yukiko Mishima. El título deliberadamente mezcla una palabra inglesa con una francesa, indicando la suerte de ambigüedad en las que se va a mover el personaje principal. Él es un padre casado en segundas nupcias con una mujer que tiene dos hijas, una que empieza su adolescencia y otra chiquita. Por su parte él también tiene una hija de su primer matrimonio, también iniciando su adolescencia. Lo interesante del film es el tratamiento del tema del “padrastro” y su relación con los hijos o hijas en este caso, de su pareja. Un tema poco explorado y que en particular en este caso, y probablemente por factores propios de la cultura familiar japonesa, adquiere rasgos más conflictivos y problemáticos que en otras sociedades.
Premio del jurado para 
el film japonés
Dear Etranger

El premio a la mejor dirección fue para Maciej Sobieszczanski por el film La Réconciliation (Zgoda) de Polonia. También un premio merecido para un director que logró con acierto describir de un modo descarnado lo que en su país debe ser todavía un tema delicado, si no tabú: el tratamiento que al finalizar la guerra los polacos dieron a los alemanes capturados y polacos colaboradores, un tratamiento que estuvo marcado por la brutalidad que desata el afán de venganza.

El premio a la mejor actriz fue para Irena Kovacevic por su  actuación en el film Les Bases de Meurtres  (Družinica)  de Jan Cvitkovic (co-producción de Eslovenia y Serbia).

Escena del film checo A Prominent Patient










El premio al mejor actor fue discernido a Karel Roden protagonista del film A Prominent Patient  (Masaryk) de Julius Ševcík (co-producción República Checa-Eslovaquia). El actor personifica de un modo muy realista los rasgos contradictorios de quien fuera una notable figura política en Checoslovaquia durante el período entre las dos guerras mundiales.

El premio al mejor guión fue adjudicado a Hosein Namazi por el guión de su film Appendix (Iran). En tanto que el director del film chino The Hidden Sword,  Xu Haofeng, ganó el premio a la mejor contribución artística.

En la competencia de Primeras Obras, el Zenit de Oro (Primer Premio) fue adjudicado al film sudcoreano The Return  (Dolaonda) de Chul Heo. El Zenit de Plata fue para Sweet Parents de David Bly  (co-producción Canadá-EE.UU.) y el Zenit de Bronce fue para Les Éléphants Perdus de Claude Andrieux (Francia).

¿Y EL FUTURO DEL FESTIVAL?
Como ya se ha venido sintiendo desde hace unos años, el Festival de Filmes del Mundo de Montreal cada vez se encuentra con mayores problemas derivados de su falta de financiamiento. Problemas que su vez  repercuten en una notable desorganización, aunque decimos esto sin desmerecer el esfuerzo hecho por los voluntarios que manejaron casi todos los aspectos prácticos del evento. Sin embargo, sólo un día antes en conferencia de prensa, su director Serge Losique y el principal accionista de Quebecor, Pierre Karl Péladeau, anunciaron que este último consorcio se haría cargo de la deuda que arrastraba el histórico Cine Imperial, lo cual dio un cierto respiro para asegurar la continuidad de la sala del Festival. Los detalles de ese acuerdo entre Losique y Péladeau no se han dado a conocer y no es claro si el apoyo económico se extenderá al festival mismo.

En cualquier caso, Serge Losique en la ceremonia de clausura volvió a mostrarse desafiante y anunció la fecha de la 42ª edición del evento que deberá tener lugar entre el 23 de agosto y el 3 de septiembre de 2018. Losique incluso anticipó la fecha de la edición de 2019. Además—por si alguien tuviera algunas dudas—aseguró que su estado de salud es bastante bueno (Losique tiene 84 años, pero se mantiene alerta y con la voluntad—otros dirán porfía—por seguir sacando su festival adelante).

Por cierto el tema tiene muchas aristas, pero hay cosas que no se pueden negar: Losique tiene muchos enemigos, tanto en los medios como en  las agencias gubernamentales que son las que financian la mayor parte de estos eventos: Telefilm Canada a nivel federal, y SODEC a nivel provincial. Los medios en general han ignorado el festival, la emisora local de la CBC no le dio ni un minuto de tiempo de pantalla aun cuando esa estación a veces ha cubierto hasta los pequeños festivales de barrio, sin contar otras coberturas triviales, la prensa escrita viene hostigando a Losique desde hace tiempo, el año pasado Brendan Kelly, un comentarista de The Gazette, llamó de un modo muy duro a que Losique matara su festival, los periodistas de medios francófonos han sido igualmente duros en culpar a Losique por el estado del festival. Aunque como en todas las cosas, hay también otro lado de la historia. Fundamentalmente que si bien Losique puede ser todo lo autoritario que se quiera, por otro lado los burócratas a cargo de Telefilm Canada y SODEC no lo son menos. Estos burócratas hace ya tiempo que decidieron matar el Festival de Filmes del Mundo, en 2005 incluso levantaron un evento paralelo (Festival Internacional de Cine de Montreal) que fue un fiasco, duró un solo año y costó millones de dólares a las dos agencias gubernamentales que lo financiaron. (¿Alguien les pidió cuenta por ese malgasto de fondos de todos los contribuyentes?)

Más allá de quien tiene razón, lo cierto es que ha sido gracias a Losique y al Festival de Filmes del Mundo que por lo menos el cine latinoamericano se ha dado a conocer en Montreal. Antes de que este festival empezara a mostrar los filmes de Subiela, Lombardi, Littin, Caiozzi, entre muchos otros,  nadie en Montreal o en Quebec había oído hablar de cine de América Latina. Y lo mismo vale para el cine español, africano, chino, etc. Esto hace entonces pensar que el afán de Telefilm Canada y SODEC simplemente refleja uno de los males de las políticas culturales en Canadá en general y en particular en Quebec: el que se deje el poder decisorio en manos de burócratas que toman partido de acuerdo a sus propias simpatías e intereses en esto de adjudicar fondos a tal o cual evento. Se dirá que en esto no hay alternativa, que peor sería que las decisiones las tomaran los políticos (ministros u otros designados por el partido del gobierno de turno). Puede ser, pero al  menos los políticos en tanto funcionarios electos, tienen que responder a la ciudadanía y si su desempeño es incompetente, arbitrario o derechamente corrupto, al menos hay la posibilidad de removerlos en la próxima elección. Los burócratas en cambio son prácticamente inamovibles y no responden a persona alguna.

Serge Losique ya anunció la fecha de la próxima
 edición del Festival de Filmes del Mundo en 2018
Tampoco es cierto como dicen algunos cronistas como el ya citado de The Gazette, que otros festivales como el Festival del Nuevo Cine (FNC) o Fantasia puedan pasar a ocupar el puesto del Festival de Filmes del Mundo. Mientras el FNC como su nombre lo indica se orienta principalmente a mostrar el cine de corte más de avanzada y experimental centrado primeramente en Norteamérica y Europa, con algunas incursiones limitadas en el cine latinoamericano y asiático, y Fantasia es un festival dedicado al género del cine fantástico, horror y de ciencia-ficción, el Festival de Filmes del Mundo tiene un mandato diferente como lugar de encuentro de las cinematografías de todo el mundo y con una diversidad de géneros, estilos y aproximaciones (convencionales o exploratorias). Montreal ofrece un espacio para todos ellos y debe continuar siendo así, aunque los burócratas culturales en su limitado o interesado horizonte perceptivo no lo conciban de esa manera.

Por nuestra parte, esperamos que llegado agosto del próximo año tengamos nuevamente el Festival de Filmes del Mundo con nosotros, porque de no ser así sería una pérdida para Montreal y para quienes apreciamos el cine proveniente de todas partes del mundo. Después de todo no es sólo en Hollywood donde se hacen películas.